Según se indicó, la orden fue impartida por el Comando del Ejército y el Ministerio de Defensa a dos experimentados militares que lanzarían ciberataques contra esos países
De acuerdo con el documento, con clasificación “ultrasecreto”, se pidió realizar actividades de inteligencia y contrainteligencia contra Venezuela, Nicaragua y Ecuador con el fin de apoyar la recolección de información de carácter estratégico.
Así lo reveló la revista Semana que publicó el supuesto plan de esta administración para lanzar ciberataques y espiar a estos países considerados como “amigos” del mandatario colombiano, pero que podrían representar una amenaza.
El artículo considera relevante las fechas de las órdenes (24 de febrero y 29 de marzo de 2023) en las que se les autoriza a varios agentes militares del Batallón de Ciberinteligencia del Ejército, en Facatativá (Cundinamarca), desarrollar actividades contra Viuda Negra, Nutria y Escorpión porque ya estaba Iván Velásquez como ministro de Defensa.
En el documento se establece que se trata de una “actividad que contribuirá de manera significativa a conocer, prevenir y enfrentar la amenaza híbrida del actor de las fuerzas convencionales en aras de garantizar independencia, soberanía, integridad territorial y el orden constitucional, en cumplimiento a la Orden de Operaciones Bicentenario Héroes de la Libertad (Bacib)”.
Del mismo modo, se indicó que para ejecutar la misión de ciberespiar a los tres vecinos, el Ejército autorizó a que se emplearan “medios técnicos y talento humano, los cuales son adecuados y apropiados. Los agentes de inteligencia están entrenados y capacitados en normatividad legal vigente aplicable a las actividades de inteligencia y contrainteligencia (…) en el manejo de la información, tácticas, técnicas y procedimientos concernientes a la metodología de las operaciones de inteligencia”.
El artículo señala que la Fuerza Militar recalcaba a sus agentes que la misión es ultrasecreta que es el “nivel de clasificación que se debe dar a todos los documentos de inteligencia y contrainteligencia que contengan información sobre posibles amenazas, riesgos, oportunidades o capacidades que puedan afectar al exterior del país, los intereses del Estado o relaciones internacionales”.
La inteligencia del Ejército
Según el artículo de Semana, desde que llegó el presidente Petro con su ministro de Defensa, Iván Velásquez, se debilitó la inteligencia del Ejército.
De acuerdo a las fuentes de ese medio, en un solo año ordenaron una barrida de uniformados expertos y decretaron traslados injustificados de personal que estaban en posiciones clave. Así mismo, equipos fundamentales para combatir el crimen se quedaron sin mantenimiento. Y además hubo un abrupto cambio de estrategia que eliminó los llamados “objetivos de alto valor”.
También se aseguró que, en el último mes, algunas operaciones contra la estructura de Iván Mordisco, jefe de las disidencias de las Farc, no fueron autorizadas, pese a que los militares, basados en información de inteligencia, tenían en la mira a varios de sus integrantes. Y a esto se agrega que varios militares retirados que acompañaron la campaña presidencial de Petro regresaron a la institución.
El informe indica que en lo que va del Gobierno Petro, dos generales y varios coroneles han sido removidos de sus cargos en inteligencia militar y que esos cambios han generado una inestabilidad en la línea operativa en unidades estratégicas entre las que se encuentra el Comando de Apoyo de Combate de Inteligencia Militar (Caimi).
Esta unidad, que se encarga de la ciberinteligencia, cuenta con cinco batallones estratégicos y es la que define los objetivos de alto valor, identifica las amenazad externas, cuenta con el batallón de inteligencia de guerra electrónica y cinco aviones de inteligencia.
Se puntualiza en que esta unidad ha contado con dos comandantes en un año: el general Óscar Eduardo Vera que fue relevado por el general William Prieto, que asumió el 27 de julio de 2023.
Lo mismo sucedió en la brigada de inteligencia militar número 2 donde ha habido dos comandantes: los coroneles Héctor Méndez y Alexánder Porras Plata.
De acuerdo con fuentes consultadas por la revista se concluye que estos relevos tan constantes en esas unidades no son tan normales ni convenientes.
INFOBAE