-
Este nombramiento se realizó conforme al Decreto 1345 de agosto de 2023, que establece un reconocimiento formal a la experiencia y conocimientos de los docentes indígenas.
Pereira, 4 de septiembre de 2024. En un acto histórico, liderado por la Secretaría de Educación departamental, el gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño, presidió la posesión de Olivia Charicha Dosabia como dinamizadora pedagógica en propiedad en la Institución Educativa Intercultural Dokabú, sede Yoraudó, ubicada en Pueblo Rico.
Este nombramiento, el primero en todo el país bajo la figura de Cualificación Cultural Comunitaria, marca un hito en el reconocimiento de la experiencia de los docentes indígenas y su saber ancestral.
“Este es un importante avance para Risaralda, que nos posiciona como líderes en la valoración del conocimiento tradicional y cultural de nuestros pueblos originarios”, afirmó el gobernador Patiño Ochoa durante la ceremonia.
Olivia Charicha Dosabia, al asumir su nuevo rol, expresó su agradecimiento por este significativo reconocimiento; “Soy una mujer Embera que conoce su cultura, su vestuario, tejidos y cantos; eso nos permite contar nuestra historia a la comunidad como lo hacían nuestros ancestros”.
Su nombramiento refuerza el compromiso de la Gobernación de Risaralda con la inclusión y la equidad en la educación, integrando de manera formal y significativa el saber cultural de los pueblos indígenas en el sistema educativo del departamento.
El emotivo acto contó con la participación del gobernador del resguardo indígena Gitó Dokabú, Darío Restrepo, así como de otros miembros de la comunidad Embera. También estuvieron presentes representantes de la Secretaría de Educación Departamental, liderados por la secretaria de Educación, Dora Ligia Agudelo.
Este nombramiento se enmarca en los objetivos del Plan de Desarrollo 2024-2027, donde la Gobernación de Risaralda, bajo la dirección de Juan Diego Patiño Ochoa, continúa avanzando en la reducción de las brechas educativas y sociales en los territorios indígenas.
El proceso demuestra que el respeto y la valorización de las tradiciones culturales pueden coexistir y fortalecerse dentro del ámbito académico, consolidando un sistema educativo más equitativo e inclusivo.
|
|
|
|
|