Así lo dio a conocer Roberto Suárez, secretario de la Organización Internacional de Empleadores (OIE), en comunicación remitida al ente mundial, en la que insistió en la necesidad de convocar a la Comisión de Concertación Nacional de Políticas Laborales y Salariales
La Organización Internacional de Empleadores (OIE) ha solicitado a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) intervenir de manera urgente en Colombia, según confirmó su secretario, Roberto Suárez. El directivo hizo hincapié en la preocupación por la actitud adoptada por el Gobierno nacional, en el sentido de que no hay progresos en las mesas de concertación conjuntas; justo cuando se quiere tramitar en el Congreso de la República la reforma laboral.
En la carta enviada al director de la OIT, Gilbert Houngbo, y que fue replicada por diferentes medios, Suárez destacó que se ha roto el diálogo tripartito en el ámbito laboral, por lo que, desde su perspectiva, es motivo de inquietud para empleadores y trabajadores. Y mencionó cómo se han adoptado otras prioridades, sin que se adopten los mecanismos constitucionales para las consultas que deben existir entre el Estado, las organizaciones empresariales y los sindicatos.
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La Comisión de Concertación Nacional de Políticas Laborales y Salariales no ha sido convocada para ser escuchada y para realizar una verdadera consulta, tal y como lo dispone el artículo 56 de la Constitución Nacional, en armonía con el Convenio 144 de la OIT ratificado por Colombia”, reseñó el directivo, lo que sería clara muestra de la forma en la que se está debilitando el diálogo social en el país, pese a que es, en el papel, uno de los pilares de la actual administración.
“Una reforma laboral que no atiende los problemas estructurales del mercado”
En el mismo sentido, el secretario expresó cómo el Ejecutivo ha tratado de aprobar reformas significativas como la del sistema de salud y la del sistema pensional, sin haber siquiera establecido los caminos para fomentar el diálogo entre empleadores, empleados y el Gobierno. Este accionar no solo desconoce a los trabajadores y empleadores, sino que podría tener repercusiones negativas para todos los trabajadores formales. Según el documento.
La inquietud sobre el compromiso del Ministerio del Trabajo se dio luego de que el titular de la OIE expresó que los espacios de diálogo no han sido convocados en meses, lo que incrementa el temor de que las reformas se aprueben sin incluir los análisis que den mayor contexto. Asimismo, resaltó cómo la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) ha sido excluida de importantes espacios de discusión como el Consejo Nacional de Riesgos Laborales.
Es decir, sin considerar –según él– las opiniones y necesidades de los empleadores.“En ese sentido, el Gobierno de Colombia está impulsando una reforma laboral que no atiende los problemas estructurales del mercado laboral”, se precisó en la misiva, en la que también se solicitó que se lleve a cabo una intervención ante el Gobierno para restablecer los procesos de diálogo social conforme a las obligaciones internacionales; en específico siguiendo las disposiciones del Convenio 144.
Y es que, de acuerdo con lo dicho por Suárez, este nuevo articulado de la reforma laboral, que avanza a paso lento en la Cámara de Representantes, no fue socializado; a diferencia del primer texto. Por ello, se exige “la máxima prontitud restablezca los procesos de diálogo social conforme a las obligaciones contraídas internacionalmente”.
Cabe resaltar que este panorama podría llevar a la implementación de iniciativas que, en vez de ser solución, se conviertan en problema, teniendo en cuenta el objetivo de mejorar las condiciones de los trabajadores, a través de actividades de consulta inclusivas y constitucionales. Y, sobre todo, como lo advirtió el directivo sindical, esto ha generado “un desconocimiento de los interlocutores sociales más representativos”, y que se desconozcan las preocupaciones del proletariado.
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